Las carreteras estadounidenses invitan a organizar largos viajes en coche. Ya sea por lo que hemos visto en las películas o por los míticos recorridos que todos conocemos, hacer una ruta en coche por Estados Unidos es una actividad que, por regla general, suele motivar a muchos turistas. En Rutas de Escape ya te hemos comentado unas cuantas, por ejemplo, la que nos llevó por la Costa de Florida y Orlando o la histórica Ruta 66. Esta vez te proponemos una ruta por las principales ciudades del Oeste americano.
Te sentirás una estrella de Hollywood en Los Ángeles, en San Francisco cruzarás el Golden Gate y, si quieres, emularás a Sean Connery tratando de escapar de Alcatraz. Y, por continuar con la vertiente cinematográfica, para terminar, te proponemos ser James Bond y jugar tus cartas en algún casino de Las Vegas.
Pero lo más importante es que para llegar a todos estos lugares surcarás carreteras infinitas, desérticas algunas, paisajísticamente espectaculares otras. Y, por si fuera poco, podrás acercarte a Santa Bárbara y Monterrey y meterte un rato en la Ruta 66.
En total, 2.235 kilómetros en 11 días y ocho ciudades por descubrir. Prepárate porque te espera un viaje inolvidable. Siéntete el dueño de la carretera en esta ruta por las principales ciudades del Oeste americano.
2235 Km totales
Ciudad de origen - Los Ángeles
Los Ángeles
Los Ángeles - Santa Bárbara
Santa Bárbara - Monterrey
Monterrey - San Francisco
San Francisco
San Francisco - Fresno - Bakersfield
Bakersfield - Mojave - Las Vegas
Las Vegas
Las Vegas - Los Ángeles
Los Ángeles - Ciudad de origen
Ciudad de origen
Ciudad de origen - Los Ángeles
Lo siento, pero no hay tiempo para jet lag ni para descansos. Vete al hotel, deja la maleta y ponte en marcha, que hay mucho que ver en Los Ángeles, antes de, en el tercer día de esta ruta, poner rumbo a Santa Bárbara. Los Ángeles es la ciudad más grande de California y una de las más importantes de América. Además de la capital de la provincia, también están Long Beach, Santa Mónica, West Hollywood, Beverly Hills y Malibú. Tu sensación paseando por sus calles será la de haber estado ya allí, pero no, son tus ojos los que te llevan a las escenas de las miles de películas rodadas en esta ciudad. La catedral, el Walt Disney Concert Hall o el edificio del Ayuntamiento (donde estaba la redacción del Daily Planet en la que trabajaba Superman) son lugares de obligada visita en el centro histórico de Los Ángeles. También, por supuesto, el Paseo de la Fama. Imperdibles son los barrios de Chinatown y Little Tokyo. El lujo te espera en Beverly Hills, las playas y el famoso muelle en Santa Mónica. El toque bohemio y, en el 9.500 de Wilshire Blvd, el hotel donde se alojaron Richard Gere y Julia Roberts en Pretty Woman, en Sunset Strip.
Los Ángeles
Seguimos en la ciudad del celuloide. Este segundo día, si te parece, vamos a dedicarlo por completo al mundo del cine. Ya te dijimos que no había tiempo que perder. Y para abrazarnos al séptimo arte, nada mejor que fotografiar el cartel más grande y famoso de la ciudad y, después, entrar en el mundo de fantasía que es Universal Studios. Se calcula que para hacer una ruta completa y disfrutar de sus atracciones y shows deberás estar allí entre 6 y 8 horas. Lo mejor es que planifiques tu visita con anterioridad, teniendo claro qué es lo que sí o sí quieres ver, dónde te quieres montar y qué espectáculos pretendes disfrutar. Entre los lugares más destacados está el mundo mágico de Harry Potter o el universo de Los Simpson. También podrás recorrer el Parque Jurásico, descubrir el hotel de Psicosis o la guarida de Tiburón. Una muy buena opción para que no se te escape nada es realizar el Studio Tour, en el que pasaras por los decorados que acogieron escenas famosas de películas y series. Y, al finalizar el recorrido, verás un espectáculo de Fast and Furious.
Los Ángeles - Santa Bárbara
Llego el día de abandonar Los Ángeles. Volveremos para finalizar esta ruta por las principales ciudades del Oeste americano. A 190 kilómetros al norte de LA está Santa Bárbara. Conocida como la “Riviera de California”, lo más espectacular (aunque no lo único, como ahora veremos) son sus playas. East Beach, Cabrillo Beach, Butterfly Beach, Miramar, Carpintería, Thousands Steps, Leadbetter… son solo algunas de las mejores playas de Santa Bárbara. Lugares idílicos para pasar un día tranquilo de playa, practicando deportes acuáticos, viendo leones marinos o nadando con delfines. Pero ya hemos dicho que Santa Bárbara es más, así que haz un pequeño esfuerzo y no te quedes todo el día tirado en la fina arena. La ciudad fue fundada por españoles en 1782 y pasó a dominio estadounidense en 1846. Dando un paseo verás una bonita mezcla de casas de estilo victoriano y otras típicas del colonialismo español. El principal exponente de este último estilo es la Mission de Santa Bárbara. El Palacio de Justicia es otro lugar digno de visitarse, fue construido en estilo morisco-español en 1929, cuatro años después del terremoto que destruyó gran parte del centro de la ciudad. Icónico es el Stearn’s Wharf -el muelle de madera-, y, para cenar, la Funk Zone es una buena elección. Pero antes, si te apetece y tienes tiempo, reserva tu visita de dos horas a Lotusland, uno de los mejores jardines de California.
Santa Bárbara - Monterrey
La cuarta es una jornada larga en la que iremos de Santa Bárbara a Monterrey, a 426 kilómetros hacia el norte, siempre muy cerca de la costa. Fue fundada por españoles en 1770 y, de 1777 a 1849, fue la primera capital de California. De nuevo te esperan maravillosas playas y multitud de opciones para conocer la fauna marina (ballenas y delfines, sobre todo). También la posibilidad de realizar deportes acuáticos, el kayak o el surf son los más practicados, y en playas como Lovers Point Beach o Asilomar State Beach encontrarás muchos establecimientos de alquiler de material. Si te gusta el golf, un lugar idílico para practicarlo es Pacifig Grove, donde se haya uno de los campos de golf más impresionantes del mundo: 18 hoyos con magníficas vistas al mar. Allí se encuentra, además, uno de los faros en uso más antiguos de Estados Unidos. No debe faltar una visita a Old Fisherman’s Wharf, el muelle desde el que parten los barcos que te llevarán a avistar ballenas y una zona perfecta para comer. Cannery Row es la zona centro, quizás la más turística de la ciudad. Si tienes tiempo, no dudes en reservar tres horas para visitar uno de los acuarios más espectaculares del mundo. Será, literalmente, como andar bajo las aguas. Point Lobos Natural Reserve es otra muy buena opción: una reserva natural al borde del mar con varias opciones para hacer senderismo. Antes de cenar, recibe a la noche desde Spanish Bay o Asilomar Coastal Trail. Dos lugares para disfrutar de unas bellísimas puestas de sol.
Monterrey - San Francisco
Seguimos hacia el norte, y pasamos de una pequeña a una gran ciudad, nos espera San Francisco, a unas dos horas en coche de Monterrey. Es la capital cultural del Oeste americano, una ciudad que, con el paso del tiempo, se ha convertido en una de las más animadas, desde el punto de vista artístico, de Estados Unidos. Llevamos días viendo increíbles bahías, y, sin embargo, las más impresionantes están en San Francisco. Los “piers” son los muelles de la bahía de San Francisco, recorrerlos es una actividad obligada. El más famoso es el 39, hogar de una colonia de leones marinos. Te acuerdas cuando te dijimos que si te querías convertir en Sean Connery, pues ha llegado el momento, porque desde muchos muelles salen barcos en dirección Alcatraz. Otro bonito recorrido es el que te llevará por los diferentes barrios de la ciudad, cada uno con su idiosincrasia y particularidades: Fisherman’s Wharf es el antiguo barrio de pescadores, hoy convertido en uno de los lugares con más ambiente de la ciudad. El barrio hippie es Haight-Ashbur, el de Castro es una zona de negocios con muchos restaurantes (también es el barrio gay) y el de Mission es el barrio latino, donde abundan las casas de estilo colonial. Seguimos paseando por los distritos de San Francisco: los más importantes museos están en Richmond Street; las casas victorianas y los grandes jardines se encuentran en Alamo Square. Fillmore District es la zona de residencia habitual de los nativos, quizás con menos atractivos para el turista, pero es el lugar que has de recorrer si quieres saber cómo viven los de allí. Aún queda una sorpresa, o una prueba de fuego (cómo prefieras): baja con el coche por Lombard Street, una de las calles más empinadas del mundo y, por supuesto, la calle más empinada de San Francisco con 40º de inclinación. Una auténtica montaña rusa, pero con coches de verdad.
San Francisco
El sexto día lo dedicaremos a conocer los alrededores de San Francisco, donde también te esperan lugares de gran belleza e interés, tanto cultural como paisajístico y gastronómico. Y saldremos por el norte, ¿sabéis por dónde? No podéis iros de San Francisco sin cruzar el Golden Gate, la única salida de la ciudad por el norte con sus 1.970 metros de longitud y sus dos pilones de 227 metros de altura. Santo y seña de la ciudad. A 15 kilómetros hacia el norte está Sausalito con su Point Reyes National Seashore, donde avistarás ballenas que van hacia Alaska, focas y elefantes marinos. Los vinos californianos, cada vez más importantes, salen de los enormes viñedos de Sonoma y Napa, a una hora en coche (por la 101 o la 121) de Sausalito. Si quieres hacer una cata en alguna bodega reserva con antelación. Ya de regreso, deberías parar en Berkeley y Oakland y conocer sus famosas universidades. La primera es el hogar de los hippies, la segunda es más hípster. El ambiente de Oakland, y sus variedades gastronómicas, te atrapará. Visita Jack London Square, tómate un vino y, si te apetece antes de cruzar de nuevo el Golden Gate, disfruta de otra increíble puesta de sol en Point Bonita. En caso de que prefieras volver antes, otra buena opción es subir a las montañas Twin Peaks.
San Francisco - Fresno - Bakersfield
Llega la jornada más larga de esta ruta por las principales ciudades del Oeste americano. Unos 500 kilómetros hacia el sur separan San Francisco de Bakersfield y, por el camino, pararemos en Fresno. Lo más impresionante de esta ciudad son los Jardines Subterráneos Forestierre, que conectan más de 100 salas a diferentes niveles e incluye la visita a unas alucinantes catacumbas. La parada definitiva será Bakersfield, que se ha convertido en un centro artístico y de fomento de la cultura de primera categoría, no en vano, de allí es el “sonido Bakersfield”, un subgénero del country que nació en contraposición al “sonido Nashville”. En el Distrito de las Artes hay un buen número de galerías y espacios culturales. Tampoco estaría de más que vieras algún espectáculo en el Teatro Fox o en el Buck Owens Crystal Palace. Pero antes de una ciudad altamente cultural, Bakersfield fue famosa por el petróleo y la agricultura. Fue el lugar que inspiró a Paul Thomas Anderson para realizar la película Pozos de ambición.
Bakersfield - Mojave - Las Vegas
Esto se va terminando, pero aún quedan varios platos fuertes. La de hoy es otra etapa larga, casi 500 kilómetros entre Bakersfield y Las Vegas. Pero, como otras muchas veces, lo interesante no sólo está en el destino, sino en el camino. Para llegar a la otrora “Meca del juego” (Macao la ha superado en los últimos años), hay que pasar por el desierto del Mojave, uno de los desiertos más grandes de Estados Unidos, que forma parte de cuatro estados: California, Utah, Arizona y Nevada. En su interior hay tres parques naturales: Death Valley, Joshua Tree y Mojave National Preserve. Te recomendamos ver este último, donde observarás el termómetro más alto del mundo, con 41 metros de altura. Las temperaturas, como podrás imaginar, son extremas, superando los 50º C en verano y bajando de los -18º C en los meses de invierno. A menos de media hora de Las Vegas está el Red Rock Canyon National Arena, que es un área delimitada del desierto con increíbles formaciones rocosas. Si te atreves (por las temperaturas) hay opción de hacer un recorrido de 21 kilómetros en los que pararás en diversos miradores. Otro punto de elevado interés es el famoso Death Valley National Park, el segundo parque nacional más extenso de Estados Unidos. Mañana toca ver Las Vegas. Prepárate.
Las Vegas
Último día efectivo de viaje para conocer de primera mano esta ciudad llena de colores que tantas veces has visto en televisión. Lo monumental y cultural ya lo hemos pasado, ahora estás en una urbe pensada por y para el dinero. Con lugares cerrados que imitan la luz del día, para que no te sientas atrapado. No dejes de recorrer El Strip, la avenida más famosa de Las Vegas, en la que saltarás de la Torre Eiffel a la Estatua de la Libertad pasando por los canales de Venecia o las pirámides de Egipto. Puedes entrar en todos los hoteles –algunos son auténticas obras de arte– y, por supuesto, echar unas moneditas si te sientes atraído. Será difícil que no. No te pierdas el espectáculo de agua y luces del Bellagio, súbete a la gran noria de Las Vegas, suelta adrenalina en la montaña rusa del Hotel New York o en el hotel Stratosphere y su torre de 350 metros de altura, con tres atracciones no aptas para cardíacos. Visita Fremont, antaño calle principal del ocio, hasta que los grandes casinos llegaron arrasando. Allí verás los primeros casinos de Las Vegas, algunos con un toque tan decadente como atractivo. Si has sido previsor habrás reservado para disfrutar de alguno de los múltiples espectáculos que cada día hay en Las Vegas: el Circo del Sol, Zombie Burlesque, tributo a Elvis. Y, por supuesto, no te vayas sin la famosa foto en el cartel de bienvenida de la ciudad.
Las Vegas - Los Ángeles
Ver Las Vegas por el día, con la luz del sol y los miles de carteles apagados también tiene su interés. Después, toca volver a Los Ángeles y, para ello, deberás recorrer más de 450 kilómetros, de nuevo por el desierto del Mojave. Esta es también la última etapa de la mítica Ruta 66. A veces, como en las bodas, de una ruta en coche sale otra. Quién sabe.
Los Ángeles - Ciudad de origen
Si te ha quedado algo sin ver o hacer en Los Ángeles, y tienes tiempo antes de despegar, aprovecha, es tu última oportunidad. Así termina esta maravillosa ruta por las principales ciudades del Oeste americano. Has visto desiertos, cañones, valles, ciudades que apuestan por la cultura, otras llenas de luces, te has sentido una estrella de Hollywood e incluso has escuchado buena música. ¿Se puede pedir más?
Ciudad de origen
De vuelta a la rutina recuerda el pedazo de viaje que te has pegado. Piensa también que, para regalarte maravillas de este tipo, hay que pasar un tiempo de rutina. Siempre que se pueda, extrae lo bueno de las cosas y empieza ya a planificar tu próxima escapada. Ya sabes que en Rutas de Escape las ideas nos sobran.
Consejos en ruta
- Permiso: Para viajar a Estados Unidos necesitas sacarte un permiso de viaje electrónico llamado ESTA. Se obtiene de manera telemática.
- Conducción: Adelanta por la derecha, es legal y lo hace todo el mundo. Cuando haya una señal que indique giro a la derecha, aunque el semáforo esté en rojo, es obligatorio girar. No te pases ni un minuto del tiempo que puedas estar aparcado.
- Deja propina en todos los sitios.